Nadie duda que existen diferencias entre hombres y mujeres, pero muy pocos fabricantes lo tienen en cuenta a la hora de diseñar las raquetas para uno u otro sexo.
Generalmente raquetas para hombres que se presentan con menor peso, mayor potencia (power) y una cosmética limitada generalmente a lo cromático, se presentan como pensadas y diseñadas para ellas. En realidad se deberían diseñar las raquetas teniendo en cuenta las propiedades anatómicas y las necesidades específicas de las mujeres.
Las mujeres son generalmente 10% promedio más pequeñas que los hombres y un 15% más livianas. Tienen un centro de gravedad corporal diferente y golpean con una fuerza inferior de un 30% aproximadamente.
Ello ha demandado algunas diferencias en la construcción de raquetas para mujeres:
1) Nueva y más redonda empuñadura anatómica. Las manos femeninas por lo general suelen ser más pequeñas que la de los hombres y emplean una fuerza menor al cerrarse. Además es más pequeña la palma de las manos y más largos los dedos, lo que demanda una específica estructura anatómica. Contando además con un grip más blando para un mayor confort. 2) Novedoso sistema de empuñadura amortiguante dirigido a minimizar impactos y vibraciones.
Estas innovaciones redundarán en beneficio de ellas, quienes podrán empuñar una raqueta acorde con sus necesidades.